Acerca de Josué Nikao
Este camino nació en medio del quebranto. De sentir que lo tenía todo y, aun así, vivir con el alma vacía. La pasión por mi trabajo se había apagado, mis talentos se sentían desperdiciados y mi vida se volvió una sucesión de logros sin sentido.
Por dentro sabía que algo no estaba bien: vivía incongruente con lo que creía, con mi familia, con mi propósito y conmigo mismo.
En ese silencio encontré lo único que realmente puede restaurar a un hombre: Dios. Y cuando lo conocí de verdad, descubrí porque esto aquí.
Hoy sé que mi tarea no es predicar, sino servir para despertar propósito, fe y conciencia en las personas. Y que mis talentos —la comunicación, la visión, la capacidad de conectar a otros y mi experiencia levantando empresas— fueron diseñados para una misión mucho mayor: ayudar a las personas a descubrir el lugar donde pueden brillar.